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viernes, mayo 01, 2009

En busca de la Competitividad

En busca de la Competitividad
Autor: Alberto Núñez Mendoza

Cuando pensamos en el principal objetivo o resultado que pretenden alcanzar las organizaciones de cualquier índole, sean públicas o privadas, grandes, medianas, pequeñas o micro; con o sin fines de lucro, lo primero que se nos viene a la mente es el concepto de productividad, entendida como la capacidad de generar bienes o servicios con un mínimo de errores o desechos crónicos -como los llamó J. Juran- y maximizando los beneficios de todo tipo que se puedan obtener.
De acuerdo con lo anterior debemos decir que, para que una Organización obtenga el nivel de productividad deseado requerirá cumplir con dos importantes características: ser eficiente y eficaz a la vez. La eficiencia la obtendrá utilizando de manera racional los recursos a su disposición, mientras que la eficacia la logrará cumpliendo con los objetivos y metas que le hayan planteado los diferentes grupos humanos que en ella confluyen (propietarios, directivos, personal, clientes, proveedores y público en general). De tal manera, sus resultados de una empresa siempre se juzgarán en términos del nivel de satisfacción de todos aquellos que se vean afectados de forma directa o indirecta con su actuación.
Ahora bien, la pregunta que se hacen muchos propietarios y directivos de empresa, así como funcionarios de instituciones sin fines de lucro es ¿Qué se requiere para que mi Organización logre ser, cada día, más productiva?. La respuesta se ha tratado de encontrar a lo largo de muchos años, reflejándose en distintas formas o corrientes del pensamiento administrativo.
En los siglos XIX y XX, la mayoría de los estudios clásicos se centraron en encontrar El Método que ayudara a alcanzar la máxima eficiencia en empresas manufactureras principalmente, generando la mayor cantidad de bienes en el menor tiempo y costo posible, desentendiéndose, en cierta forma, de profundizar en trabajos de identificación de los requerimientos particulares de los diferentes tipos de clientes o usuarios. Un claro ejemplo de lo anterior se desprende de la famosa frase de Henri Ford que sirvió de publicidad para su afamado automóvil Ford, "Modelo T" -"usted puede pedirlo del color que sea, siempre que lo quiera negro"- .
En los estudios desarrollados por F. Taylor y que posteriormente se identificaron bajo la corriente llamada de "La Administración Científica", se observa el interés del autor en resaltar la necesidad de que empresas manufactureras promuevan dentro de sus instalaciones la realización de estudios encaminados a identificar y perfeccionar el tipo y número de movimientos necesarios para completar cada operación de sus procesos productivos, con el propósito de reducir sus tiempos de realización y por consecuencia, su costo. El énfasis se centra en una atención especial a la especialización, tanto de los trabajadores, como de las funciones que debían desarrollar los departamentos de personal y control de calidad.
También a finales del siglo XIX y principios del XX, surgió otra corriente basada en un enfoque eminentemente cuantitativo, que se derivó de los conocimientos que surgían de nuevas disciplinas como la probabilidad y estadística. Es interesante notar que aunque los primeros estudios de este tipo dirigidos a las empresas fueron desarrollados durante los primeros veinte años del siglo XX, su mayor auge en países desarrollados y en vías de desarrollo se dió durante las décadas de los años ochentas y noventas. A esta corriente administrativa se le conoce con el nombre de "control estadístico de los procesos".
Una corriente más, llamada "humano-relacionista" surgió como resultado de los estudios realizados por Elton Mayo durante los años 1920's en la empresa Western Electric Co., en Hawthorne Ills. Sus estudios sirvieron para mostrar el nivel de impacto que tienen ciertos factores de tipo sicológico y ambiental que rodean al trabajador en sus niveles de productividad y el papel de definitiva importancia que juega el aspecto humano en las organizaciones.
¿Cómo hacer más competitiva a mi empresa?
Actualmente la mayoría de los estudios señalan que la empresa para ser competitiva, necesita establecer, desarrollar y perfeccionar sistemas propios de Planeación, Organización, Dirección y Control dirigidos a lograr altos niveles de satisfacción entre los individuos que en ella confluyen, cimentados en un eficaz sistema de información interna y externa que le permita anticipar y profundizar en los cambios que se vienen dando en su medio ambiente. ¿Qué demandan nuestros usuarios?,¿Cómo estamos respondiendo nosotros y nuestra competencia a las nuevas necesidades?. Estas son algunas de las muchas preguntas que la empresa deberá ser capaz de contestar. De poco o nada serviría generar productos o servicios a un bajo costo, si éstos no pueden ser colocados en el mercado debido a que no satisfacen alguna necesidad particular de la población a la se pretenden dirigir.
Resumiendo, diremos que la productividad de una Organización se logra concentrando sus esfuerzos por elevar sus niveles de eficiencia y eficacia. La eficiencia se logrará haciendo un uso racional de los recursos con la menor cantidad de desperdicios o desechos crónicos, mientras que la eficacia la podremos alcanzar elevando el nivel de satisfacción de todos los individuos que intervienen directa e indirectamente en ella.

La Competitividad De Un País

La Competitividad De Un País
Autor: Alberto Núñez Mendoza

Este es un extracto de las principales ideas sobre competitividad expuestas por el autor M. Porter en conferencias ante diferentes audiencias durante los últimos años.
La competitividad a nivel nacional se ha convertido en una preocupación central para gobiernos e industrias en todos los países, pero no obstante la infinidad de discusiones y debates, aún no existe un consenso sobre el significado y definición del término.
Algunas personas ven a la competitividad de un país como el resultado de:
• el entorno macroeconómico en el que se desenvuelven sus compañías e industrias, el cual se ve afectado por los niveles de las tasas de interés, tasas de cambio de la moneda y déficit gubernamental.
• la relativa abundancia y bajo costo de la mano de obra de la que se dispone.
• la abundancia de recursos naturales del país.
• el tipo de políticas gubernamentales del país en términos de protección a la industria nacional, promoción de las exportaciones y subsidios a determinados sectores como el financiero, automotriz, acerero, naval, etc..
• la diferencias en las prácticas gerenciales del país, incluyendo la forma en que se conducen y resuelven los conflictos obrero patronal.
Como contestación a los anteriores planteamientos ¿Cómo podemos explicarnos el éxito de países con altos niveles competitivos que no cuentan con abundancia de recursos naturales, ni con mano de obra numerosa y con bajos salarios y que incluso han tenido importantes déficit presupuestales por años, como es el caso de Japón, Corea del Sur o Singapur?.
Y aún más, ¿cómo explicar los casos de Alemania y Suiza?, donde por mucho tiempo sus monedas estuvieron claramente sobrevaluadas con respecto al dólar de Estados Unidos, o el caso de Italia, donde aún con políticas gubernamentales inconsistentes, se logró hacer florecer una importante industria de pequeños talleres dedicados a la exportación de calzado. Todos ellos, sin lugar a dudas, han disfrutado de beneficios económicos ascendentes.
Como podemos ver es evidente que ninguna de las respuestas han sido suficientemente buenas para explicar, por sí mismas, cual es la base para que un país logre altos niveles de competitividad, aunque cada una de ellas cuenta con algunos elementos de verdad.
Ahora bien, ¿que se debe entender por una nación competitiva?, ¿es aquella en la que la mayoría de sus compañías e industrias son competitivas?, o bien ¿son aquellas en la que el tipo de cambio de su moneda layuda a que sus productos puedan venderse a los precios más bajos en los mercados internacionales y disfrutan de una balanza comercial positiva?.
De nuevo, si analizamos detenidamente las anteriores preguntas y las tratamos de contestar a la luz de las experiencias obtenidas por países considerados por la mayoría de la gente como los más competitivos en el escenario mundial, llegaremos a la conclusión de que la única explicación con sentido parte del concepto de Productividad, entendida como el resultado que obtiene un país al lograr altos niveles de eficiencia y eficacia en el uso de su capital humano (talento) y económico. La productividad bien entendida, debe reflejarse forzosamente en el nivel de vida a largo plazo de la población y debe ser el criterio fundamental para determinar la remuneración económica que reciben los habitantes y la tasa de retorno del capital utilizado en proyectos de inversión a largo plazo.
Por lo tanto, cada nación busca mejorar su nivel de productividad día a día elevando la calidad de su sistema educativo que permita a sus habitantes diseñar y elaborar productos que cumplan estrictamente con las especificaciones demandadas por los clientes, mejoren la tecnología vertida en los productos desde su diseño hasta el servicio al cliente y eleven los niveles de eficiencia detectando las fallas en los procesos, y que les permita asimismo, desarrollar las nuevas capacidades necesarias para competir a nivel mundial en los cada vez más sofisticados segmentos industriales y nuevas industrias que se están formando en el mundo.
El comercio exterior, la inversión extranjera y el turismo para arrojar resultados positivos deben traer beneficios a los países en lugar de dolores de cabeza, apoyándose en mejorar la productividad y especialización de las industrias y segmentos donde sus compañías sean competitivas e importando productos en aquellos donde sus compañías lo son menos. El comercio internacional y los flujos de inversión extranjera son benéficas porque ponen a prueba a la industria doméstica al enfrentarla a nuevos niveles de productividad internacional. En un principio, es recomendable cuidar la estabilidad financiera nacional, la cual puede verse amenazada en periodos de inquietud económica.
Lograr un equilibrio o superávit en la balanza comercial puede ser inapropiado para una nación si sólo está basado en expandir las exportaciones en base a bajos salarios y una moneda débil, importando aquellos bienes de consumo que sus compañías no producen a niveles competitivos. Esta situación puede llegar a provocar desequilibrios financieros en el mediano y largo plazos, con la consecuente reducción de los niveles de vida de la población.
El interés del gobiernos e industrias por lograr una mayor competitividad no debe centrarse simplemente en crear empleos sino, más bien, en crear empleos que tengan elevados requerimientos en términos de habilidades y conocimientos que propicien la elevación del poder adquisitivo de los trabajadores y una mayor prosperidad nacional.
En resumen, las políticas nacionales enfocadas a elevar la competitividad deben ir más allá de buscar preferentemente las ventajas comparativas (recursos naturales, bajos salarios, políticas protectoras, etc.) y centrarse en lograr mayores ventajas competitivas que incluyan: mercados cuidadosamente segmentados, productos diferenciados, aplicación de nuevas tecnológicas y economías de escala. Esta teoría debe desarrollarse bajo la premisa de que la competencia tanto a nivel nacional como internacional es dinámica y evolutiva y, por lo tanto, es necesario que la nación vaya más allá de pensar solo en término de los costos inmediatos al cuidar las condiciones bajo las cuales sus empresas puedan desarrollar ventajas competitivas en base a la innovación y las características particulares de sus productos.

Los Negocios Internacionales: Una Decisión Estratégica

Los Negocios Internacionales: Una Decisión Estratégica
Autor: Gerardo Nicolás Castillejo

En la decisión de internacionalización, uno de los primeros pasos consiste en definir hacia que mercados se quiere dirigir la empresa, decisión de gran implicancia estratégica y al mismo tiempo de gran complejidad, pues la decisión debe tomarse teniendo en cuenta los recursos y capacidades de la firma, limitando a su ves la exposición al riesgo internacional.
Además, las empresas deben elaborar supuestos sobre factores tan variables como costos y precios futuros, reacciones de los competidores y tecnología.
A pesar de esta serie de dificultades, es claro que cualquier decisión debe tener en cuenta los siguientes elementos:
Magnitud del mercado: el potencial de ventas es quizá mas uno de los factores que mayor peso tendrán en la toma de la decisión. Muchas veces se hace difícil proyectar cual puede ser el volumen de ventas para nuestros productos; algunos datos que pueden ayudarnos a pronosticar esta variable son: producto bruto interno, ingreso per cápita, índices de crecimiento, segmentos socioeconómicos, nivel de vida, nivel de industrialización, etc.
Facilidad y compatibilidad de las operaciones: en general las empresas se dirigen primero a aquellos países que perciben son más fáciles de operar. Esta percepción se basa en factores tales como condiciones de mercado similares, igual idioma, proximidad geográfica, etc.
Sin embargo, debemos señalar que una empresa no se puede quedar solo con esta categoría de mercados, sino que se debe hacer un análisis mas profundo de si realmente ese mercado es el que le conviene a la empresa.
Costos y disponibilidad de recursos: la empresa tendrá que examinar los costos de la fuerza de trabajo, los insumos de materias primas, el capital, los impuestos, costos de transporte, aranceles, a fin de determinar cual es el país mas indicado.
Riesgos: sin lugar a dudas que la decisión final no solo se debe tomar considerando el rendimiento esperado de una exportación, sino que también se deben considerar los riesgo que implica exportar a un determinado país. El grado de riesgo, control, compromiso y utilidades dependerá del tipo de estrategia de entrada por el que opte la empresa:
• Exportación indirecta
• Exportación directa
• Licencia
• Franquicia
• Joint Venture
• Inversión directa
En general se deben de considerar tres tipos de riesgos:
• Riesgo competitivo.
• Riesgo monetario y de tipo de cambio.
• Riesgo político.
Estos factores que hemos señalado son básicos para la toma de decisiones acerca de a que mercados nos dirigiremos. Gracias a la cantidad de información con la que hoy en día contamos, la mayoría de estos datos está disponible a cualquier empresa. De todos modos, el tomar una decisión respecto a estos temas es una cuestión muy difícil que se debe realizar con mucho cuidado ya que puede influir de forma importante en la rentabilidad final que obtenga la empresa.
El realizar un estudio de mercado es una tarea que implica inversión en tiempo y recursos, razón por la cual, en primer lugar, habrá que estudiar la factibilidad económica y en segundo lugar, habrá que hacer una buena preselección de mercados para estudiar solo aquellos que representen una buena oportunidad para la empresa.
Para la selección de un grupo de dos o tres mercados potenciales habrá que considerar factores macroeconómicos de los países objetivo, factores generales del mercado, así como también factores culturales que puedan influir de forma importante en la demanda de nuestros productos y/o servicios.
Después de seleccionado este grupo de posibles mercados, se debe pasar a realizar una investigación detallada de los mismos.
Los objetivos de la investigación deben ser:
• Identificar la demanda
• Conocer las posibilidades de acceso, penetración y conquista en los mercados externos y sus normas, exigencias y modalidades.
• Conocer las ventajas comparativas y arancelarias otorgadas por sistemas de acuerdos multilaterales.
• Programar la política de comercialización exterior de forma tal que los planes de acción conduzcan directamente a obtener resultados.
• Compatibilizar la política de ventas interna con las posibilidades reales que ofrezcan los mercados externos.
El contenido de una investigación de mercados internacionales, debe abarcar los siguientes ítems:
• Investigación de la demanda con mayor potencial (costos de transporte, cuerdos comerciales, aranceles, conocimiento del mercado, etc.)
• Investigación del entorno extranjero (aspectos legales, estructura competitiva, clima económico, factores culturales, factores políticos)
• Investigación de la demanda (perfil del consumidor, estacionalidad de la demanda, tamaño del mercado, segmentos de mercados, estimación de la demanda)
• Investigación de la oferta (estudios de posicionamiento, participaciones de mercados, estructuras de distribución)
• Determinación de la estrategia de entrada (exportación indirecta, directa, licencias, franquicias, inversión directa)
• Investigación de la mezcla de mercadotecnia

IMPORTANCIA DE LOS MERCADOS INTERNACIONALES

IMPORTANCIA DE LOS MERCADOS INTERNACIONALES
Autor: Pedro Epimenio Velásquez Roa
Desde los inicios de la teoría económica [1] donde se enfatiza en la importancia del comercio internacional, visto desde el punto de vista de la época, y traído por diferentes economistas en la era contemporánea de la humanidad ha tenido un realce y una importancia significativa en el desarrollo de los países que han adoptado estas doctrinas, el desarrollo de la economía en nuestra época es muy importante para el desarrollo de los mismos mercados.
Esta teoría se profundiza de una mejor forma por David Ricardo [2], donde demuestra la importancia de la de la especialización de los países con el fin de buscar una mejor ventaja competitiva en los mercados, donde los países pueden obtener mejores beneficios de una especialización en la producción de aquellos bienes que se pueden generar en un determinado país dadas sus mejores condiciones para la producción de los mismos, ahora bien en el mundo globalizado en el que hoy interactuamos encontramos diferentes connotaciones con respecto al desarrollo de estos mercados internacionales, donde un país puede exportar bienes y servicios, y también capitales de acuerdo a sus ventajas competitivas y comparativas.
Los mercados internacionales permiten el desarrollo de las economías, puesto que estas pueden producir distintos bienes y colocarlos en estos mercados para ser adquiridos por aquellos países donde no se pueden producir de una manera eficiente como el país oferente del bien, y este a su vez puede beneficiarse de los demás bienes o servicios en los cuales los otros países tienen una mejor ventaja competitiva, si bien este tipo de modelo económico es altamente criticado por la falta de trasparencia de los entes multilaterales a cargo, se tienen grandes beneficios en todos los ámbitos, es por esto que estoy a favor con la globalización, cuando un país exporta y hace que sus bienes estén el los mercados internacionales, éste puede obtener beneficios a nivel macroeconómico [3], como también las empresas que en él están pueden sacar beneficios con políticas microeconómicas eficientes, pues pueden generar empleo, y por ende las políticas macroeconómicas del gobierno generar mejor redistribución de la riqueza entre la población.
Siendo importantes los mercados internacionales, podemos observar como un exceso de ahorro en determinado país, puede servir como medio de financiación e un país con desordenes macroeconómicos, pues un desajuste en su balanza comercial, puede ser financiado por una entrada de capital en la cuenta de capital en la balanza de pagos, si esto se cumpliese a cabalidad no habría tanta desventaja entre un país y otro, el problema radica como lo indique antes en el mal funcionamiento de los entes multilaterales, tales como el FMI y la OMC, pero como lo critica Stiglitz: “El FMI y el Banco Mundial se convirtieron en nuevas instituciones misioneras, a través de las cuales esas ideas fueron impuestas sobre los reticentes países pobres que necesitaban con urgencia sus préstamos y subvenciones. Los ministros de hacienda de los países pobres estaban dispuestos, si era menester, a convertirse para conseguir el dinero, aunque la vasta mayoría de los funcionarios estatales y, mas importante, los pueblos de esos países con frecuencia estaban escépticos” [4]. Aquí él describe la época de los ochenta y el nuevo rumbo de las economías lideres (EEUU e Inglaterra), políticas neoliberales, apertura del mercado, menor tamaño del Estado, entre otras; esto demuestra la falta de inequidad de estos entes, con el fin de favorecer a los países potencias, pero bien volviendo a mi planteamiento, las importancia de los mercados internacionales no solamente esta condicionado a esta parte, también ha permitido el desarrollo de los países del tercer mundo a niveles inimaginables.
Esta percepción la desarrolla Alan Greenspan, diciendo:”En los últimos años la integración económica global se ha acelerado en una multitud de frentes. El desarrollo basado en la tecnología ha expandido de tal manera la amplitud y profundidad de los mercados que los gobiernos, aún los incrédulos, han sentido que no tienen otra alternativa que desrregular y liberalizar el crédito interno y los mercados financieros” [5], esto nos demuestra como siendo la globalización un fin económico ha permitido en el entorno a ella no solo la unificación de los mercados, sino que también el traspasar las culturas a través de las comunicaciones, además permitir a países del tercer mundo poder obtener desarrollo por medio de las tecnologías que se encuentran en todo el mundo.
Resalto esto último como el mayor logro de los mercados internacionales, el cual ha sido la búsqueda de integración entre naciones, que permiten a su vez un mejor funcionamiento en todos los ámbitos de la economía global [6], por que es la economía también una ciencia social de la cual el hombre a dejado perder su esencia, y siendo esta una forma de recobrarla con el fin de hacer una concientización entre todos, que antes que obtener beneficios económicos, podemos lograr un beneficio común, basado en una mejor calidad de vida, de la cual todos los países se deben de ver beneficiados, y no solamente aquellos que ejerzan un mayor dominio sobre la economía global.
Como conclusión digo que los mercados internacionales deben de tener un mejor control para que estos sean más eficientes y que permitan lograr una mejor integración, y la búsqueda de mejores resultados de desarrollo y crecimiento entre las naciones que lo componen, siendo este el verdadero fin y esencia de la Economía.

viernes, febrero 06, 2009

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